miércoles, 18 de febrero de 2009

CALENTAMIENTO GLOBAL FAVORECE EPIDEMIAS

Ambiente
Calentamiento global favorece epidemias de dengue y malaria
El fenómeno aumenta la distribución de los transmisores de enfermedades
Quien ose pensar que el calentamiento global es algo tan lejano que sólo perjudica a pingüinos y osos polares y que nunca nos causará impacto alguno, peca de ignorante, de ingenuo, de desinformado o de todo eso a la vez: Las consecuencias de este fenómeno son capaces de alterar no solamente a la biodiversidad y a los ecosistemas, sino que además pueden incrementar los cuadros epidémicos, fortaleciendo la presencia de enfermedades transmisibles. Napoleón Guevara, secretario general de la Sociedad Venezolana de Infectología, explicó que ello se debe a que "el calentamiento global implica modificación del clima habitual y aun cuando sea muy pequeña esa modificación, de todas maneras incrementa la distribución a escala mundial de los vectores que producen enfermedades". Precisó el infectólogo que uno de esos vectores es el mosquito, que transmite enfermedades como dengue, malaria, leishmaniasis, fiebres hemorrágicas e incluso la encefalitis del Nilo: "Se prevé y, de hecho, ya se ve la expansión de áreas donde se encuentran esos vectores y se hace más duradera la época del año en la que son capaces de afectar. El calentamiento hace que aumente la población de los vectores y la consecuencia es que pican a más personas por más tiempo durante el día". Tal ha sido la alteración provocada por el cambio climático que, según comentó Guevara, durante el invierno en el sudeste asiático jamás hubo transmisión de dengue, pero la modificación de la temperatura del Planeta ha permitido que el vector del dengue (el mosquito Aedes aegypti) sobreviva. Ahora hay dengue todo el año en esa región". Estos fen´omenos ambientales han provocado que enfermedades endemo-epidémicas; es decir, que sólo se producen en sitios muy determinados, se desplacen no solamente de un país a otro, sino de un continente a sus vecinos. Más áreas del mundo quedan expuestas a males de los que, se presumía, estaban a salvo. Controles insuficientes Luis Echezuría, director de Epidemiología de la Universidad Central de Venezuela, dijo en el más reciente Congreso Nacional de Infectología que "el control del vector del dengue, la malaria, y otras enfermedades transmitidas por mosquitos, ha sido insuficiente tanto en su manejo ambiental y en el comportamiento humano, como en la inclusión de las variables socio-económicas, la coordinación intra e intersectorial con el Gobierno y con la sociedad". Recordó, además, que "el cambio climático proviene de las formas en que se extrae, comercializa y consume la energía en el Planeta y su consecuencia más importante, el calentamiento global, produce una serie de fenómenos y consecuencias ambientales que influyen en la salud de la especie humana, con especial interés en las esferas infantiles". Si bien el aumento de temperatura en el planeta no es un fenómeno nuevo, es tan antiguo como la presencia de vida en la Tierra; también es verdad que la actividad industrial a través de la progresiva emisión de gases como el dióxido de carbono, ha llevado el calentamiento a niveles que la naturaleza no es capaz de asimilar y ha generado fen´omenos que van desde el deshielo en los polos hasta la posible extinción de especies.
Daniel Ricardo HernándezEL UNIVERSAL